El burro de Merlin

22 julio 2006

Bienvenidos a "Silent Hill"


Rose decide llevar a su hija (adoptiva) al pueblo de Silent Hill ya que no para de citarlo en sus ataques de sonambulismo. Al llegar al pueblo tienen un accidente de coche y la niña desaparece. Comienza de esta forma la aventura de Rose por encontrar a su hija. En el camino le ayudan la policía Cybill y Daliah, madre de una niña muy parecida a Sharon, la hija de Rose. Juntas hacen frente a los ataques de las criaturas del pueblo surgidas de la extraña oscuridad que lo asola. El desenlace en la iglesia con la niña apunto de ser quemada viva por una secta católica acaba en carnicería.
Probablemente nos encontramos ante la mejor adaptación que se haya hecho de un videojuego al celuloide. "Silent Hill" es tan fiel al juego que sólo falta que nos dén un joystick con la entrada para jugar con la película.
La niebla, los sonidos industriales que cargan la atmosfera hasta hacerla insoportable, el ruido de las radios rotas, el primer ataque a la protagonista, la escena en el colegio...todo es un guiño a la saga de juegos. Esta película de terror es un auténtico "survival". Rose va haciendo frente a todas las complicaciones que van surgiendo, iluminada por una linterna, con la ropa rota y chorreando sangre. A lo lejos suena una sirena y la oscuridad llega al pueblo.
El diseño de producción simplemente es perfecto y quizás esta perfección sea la principal queja de sus detractores. El gris de la ciudad en neblina, la oscuridad, el óxido de los objetos, la suciedad de las paredes... todo está cuidado al máximo. Al igual que en "La matanza de Texas" o "Las colinas tienen ojos" (los remakes) el aspecto visual del film es abrumador. Tiene tanto detalle que puede llegar a cargar la vista. Es la nueva ola del terror de diseño que muchos critican pero que a mi, personalmente, me encanta. Es como estar viendo los titulos de crédito de "Seven" durante 100 minutos. Mismas texturas, mismos colores entre grises y marrones rojizos...Puede que la trama al final se complique un poco con el tema de las dos niñas pero la fiesta gore con el alambre de espino reventándolo todo lo compensa.
Concluyendo, una película muy fiel a su original, que gustará mucho a los fans de la saga, con un aspecto visual impresionante, una banda sonora que hace que estés con el ruido del interior de una fábrica en tu cabeza todo el día (me recordó a "Cabeza borradora"), actuaciones correctas y diversión asegurada.